Cada tarjeta se sitúa sobre varios recipientes abiertos y llenos de mercurio. Por encima de la tarjeta hay una serie de cables en forma de muelle; un cable para cada posible agujero en la tarjeta. Cuando este conjunto de cables se presionan contra la tarjeta, algunos de ellos (los que han quedado encima de un agujero) pueden llegar a entrar dentro de los botes de mercurio, y así cerrar el circuito eléctrico.
Después de leer cada tarjeta, la máquina hace varias otras cosas: incrementa un contador, hace sonar una campana para avisar al operario de que ya la ha leído, y abre un cajón concreto en el que almacenar la tarjeta. El cajón elegido depende de lainformación leída de la tarjeta.
Para esta tarjeta (del censo de 1890) se creó esta plantilla que se colocaba en una especie de máquina de escribir, en la parte del operario. La máquina pantográfica trasladaba el movimiento del operario a la tarjeta real, permitiendo así escribir unas 500 tarjetas por día. (Ejemplo, del censo de 1920)
No hay comentarios:
Publicar un comentario